¿Frustrado por no tener un lugar dónde leer?

Estoy hasta la madre y frustrado. Bueno, no tan frustrado, pero sí hasta la madre de no tener un lugar en dónde leer. Ustedes podrán decir que soy un exagerado, pero de un tiempo la fecha ( como en la canción) algo está pasando en mi vida que no me permite leer en paz. Antes tenía un café exclusivo para leer, era de lujo. Es más, ni siquiera entraba a clases con tal de quedarme leyendo por horas. Pero de pronto se prohibió fumar y las cosas empezaron a complicarse. Aún así, seguí yendo a los cafés, lo malo es que siempre hay mucha gente conocida y la concentración se pierde. Así qué los cafés valieron. Durante muchos años el microbús fue un espacio emergente. Eran unos 20 ó 25 minutos que aprovechaba al máximo y que me ayudaban de lujo, pero después a los choferes quien sabe qué les pasó, que les dio por meter pata a la bárbaro, así que en lugar de agarrar mi libro, mejor me aseguraba de llegar vivo. Las bibliotecas nunca han sido de mi gusto, pero la necesidad me hace considerarlas. Pero creo que ya nadie las usa para leer, quizá para las nuevas generaciones representen un espacio en donde ¡también hay que socializar! Y, desde luego, hacer tareas y todas esas cosas. Así qué la biblioteca escolar tampoco es un buen espacio. Después fui a otra en donde se supone debe haber un silencio obligado, resultó que todos los lugares estaban llenos, excepto uno que estaba junto a un loco que estaba vestido de Miguel Hidalgo (no es mamada). Yo no tengo problemas con los atuendos de cada quien, pero ese Miguel Hidalgo se veía medio entrado en la onda del vampirismo, así que mejor huí. Llegué a mi casa, concluí que era el único lugar donde se podía leer en paz, pero no, también estaba equivocado. Mi hija me sonrió y me llevó a su recámara para que la meciera hasta dormir. ¿Alguien me puede decir dónde se puede leer en completa paz?